Para los que no viven habitualmente en un sitio frío, el invierno puede ser algo duro para el resto. El gimnasio como aliado inestimable en esas fechas o la ropa térmica son las mejores soluciones para evitar que dejemos de correr en época de temperaturas más bajas.

Consejos rápidos y sencillos: calienta antes de salir de casa; mentalízate sobre la respiración ya que probablemente te cueste un poco más, y cuida todos los detalles, unos guantes y un gorro para la cabeza te ayudarán casi tanto como unas buenas mallas y una camiseta térmica.

y rozando la obsesión, hay que tener en cuenta que si añadimos capas de ropa para luchar contra el frío nuestros movimientos no serán como estamos acostumbrados. A nivel de competición, al llevar, aunque sea mínimo, un peso mayor afectará también a nuestros resultados. Cuando comparamos carreras solemos fijarnos en el tiempo y distancia y el tipo de terreno pero las condiciones climáticas también nos afectan.

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